Ya estamos en otoño, y como el tiempo pasa volando, muy pronto el invierno nos visitará.
Es por ello que durante todo el año nos ocupamos para que las abejas tengan alimento, es decir, polen que encuentran en diversas flores y árboles que la rodean.
Si contamos con una parcela, como es nuestro caso, siempre es bueno contar con árboles nativos como el hermoso quillay, el boldo, el peumo y el maitén, entre otros. ¿Por qué nativas? Porque estas requieren menor cantidad de agua para su crecimiento y, mucho más aún, en estos tiempos que tenemos una alarmante sequía en nuestro país.
Si tenemos un jardín o una huerta, las abejas también lo agradecen mucho. En otoño e invierno podemos tener hierbas medicinales como la menta, la ruda, el romero, orégano, tomillo, cedrón y poleo. Afortunadamente, contamos con todas estas hierbas que a ellas les encanta y además nos ayudan como terapia natural.
Otra floración que podemos tener en casa, para beneficio de las abejas y hermosear nuestro entorno es la lavanda, orquídeas, crisantemos, pendientes de la reina, hortensia de invierno, flor de pensamiento, camelia, narciso y alelí, entre otras.
Importante es también tener floración en nuestros espacios de trabajo ¿o no? Una buena idea es tener cítricos ornamentales en lindas macetas, si es que no hay mucho espacio, o si es que tuvieran espacio, pueden armar una pequeña huerta comunitaria.
Querer es poder, y si nuestro objetivo es ayudarlas, hagámoslo embelleciendo nuestro hogar, entorno y/o trabajo con mucha floración.
¡Es un apoyo mutuo!
Apimedicina, 30 años de experiencia internacional y nacional.
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